Pogona vitticeps, el dragón barbudo

Dragón barbudo (Pogona vitticeps)
Dragón barbudo (Pogona vitticeps) - Imagen de Jordi Ribó

Pogona vitticeps (Ahl, 1926)
Dragón barbudo
Inglés: Central bearded dragon

Taxonomía: Los dragones barbudos forman parte de la familia de los agámidos (Agamidae), unos saurios extendidos mayormente por los continentes de África, Asia y Oceanía y también algunas poblaciones en el sur de Europa.  Esta familia incluye más de 400 especies. Pertenece al suborden de los lacertilios (Lacertilia) y al género Pogona.

Distribución: Este saurio vive en las regiones desérticas y semidesérticas del suroriente de Australia.

Descripción: Este saurio puede llegar a los 60 cm de longitud en los casos de los machos más grandes, aunque los ejemplares criados en cautividad suelen medir una media de 50 cm de longitud. La mitad de esa longitud pertenece a la cola.
Son unos animales muy corpulentos y presentan una cabeza muy grande en relación al cuerpo. Presenta una coloración marrón o gris debajo de unas manchas más oscuras presentes en el cuerpo del animal. A lo largo de su cuerpo, en la barba y especialmente en los laterales, presenta hileras de escamas en forma de pincho que le dan una imagen muy peculiar. Es un reptil característico por las escamas en forma de púas que forman una "barba", que en el caso de los machos puede adquirir color negro.

Dragón barbudo en el terrario
Dragón barbudo en el terrario - Imagen de Jordi Ribó

Pogona vitticeps
Pogona vitticeps - Imagen de Jordi Ribó

Comportamiento: Son animales que si son cuidados correctamente se mostraran activos durante el día. Viven mayormente en el suelo pero no despreciarán ramas y rocas para poder trepar y tomar largos baños de sol. Es una especie muy interesante de mantener en grupos formados por un macho y dos o más hembras en terrarios suficientemente grandes ya que se observará una jerarquía y un comportamiento territorial. Es un animal muy dócil e  inteligente ya que llega a reconocer a su dueño y la hora de la comida.

Pogona vitticeps comiendo canónigos
Pogona vitticeps comiendo canónigos - Imagen de Jordi Ribó

Mantenimiento: Se recomienda un terrario de 100x50x50 cm para un o dos ejemplares. Se incrementará un 20% de su volumen para cada animal que se añada. Hay que tener en cuenta no mantener dos machos en
un mismo terrario.
Es importante tener una buena estructura del terrario con troncos y piedras para darle mayor superficie útil. Todos estos elementos de decoración deben estar desinfectados a conciencia antes de ponerlos en el terrario para evitar la aparición de parásitos. Como sustrato se puede usar arena o papel de periódico ya que es una especie que ensucia mucho y se hace notable su olor. Hay que retirar diariamente los excrementos. Dentro del terrario hay que tener un sitio donde haya agua fresca para que el animal pueda beber y es recomendable pulverizar el terrario un par de veces a la semana con agua tibia, ya que los bichos beberán de esa agua. Para la iluminación es necesaria la aportación de rayos uva de 10.0 ya sea a través de fluorescentes o bombillas compactas. Habrá una parte del terrario más caliente y otra más fría. En la parte caliente las temperaturas serán de unos 30 grados y en la parte fría de 25. El punto caliente será de un poco más de 30 grados y ellos mismos escogerán la temperatura que necesiten. Debe haber un descenso nocturno de la temperatura pero no puede bajar más de 18 grados. Es un reptil muy sencillo de mantener siempre y cuando se les proporcionen los cuidados mínimos.

Dragones barbudos tomando el sol
Dragones barbudos tomando el sol - Imagen de Jordi Ribó

Alimentación y agua: Los dragones barbudos son unos animales omnívoros, extremadamente voraces y no dudaran en comer cualquier cosa que les quepa en la boca. De jóvenes comerán un porcentaje mayor de insectos que de parte vegetal mientras que cuando se hacen más grandes aceptaran más a gusto los vegetales. Hay que procurar darles siempre presas adecuadas a su tamaño ya que esto facilita la digestión. Les daremos una dieta variada en insectos. Los más recomendados como base son: Grillos, saltamontes y cucarachas de diversas especies mientras que esporádicamente se les puede ofrecer gusanos de la harina, gusanos gigantes, caracoles, lombrices, pinkys de ratón o gusanos de seda.
Respecto a la parte vegetal se la daremos en un platito y se les puede dar acelgas, alfalfa, berros, diente de león, rúcula, canónigo, hibisco, hojas de morera, germinados, etc. Es importante que los alimentos sean de la mejor calidad posible, nunca deberemos coger hierbas que estén cerca de una carretera ni insectos que estén contaminados por insecticidas. No se les dará fruta.
Hay que suplementar la dieta cinco días a la semana con calcio y dos veces a la semana con suplementos vitamínicos.
Aunque estos animales vivan en ambientes secos será necesario que dispongan de un recipiente con agua que habrá que limpiar cada día. De vez en cuando se podrá bañar los dragones en recipientes con 3 o 4 cm de agua a unos 30 grados. Hay que asegurarse que están cómodos y no puedan ahogarse. Durante estos baños beberán grandes cantidades de agua y defecarán.

Pogona vitticeps comiendo
Pogona vitticeps comiendo - Imagen de Jordi Ribó

Dimorfismo sexual: Distinguir el sexo es relativamente fácil, especialmente cuando son adultos. Los machos adultos son más corpulentos, suelen presentar un mayor tamaño, tienen unos poros preanales más robustos y el macho mostrara su barba negra cuando se excita. Las hembras suelen ser de menor tamaño y no presentan unos poros tan definidos.
El método más fiable consiste en observar la base de la cola, justo después de la cloaca. En caso que sea un macho se verán los dos bultos del hempene mientras que las hembras no presentaran estos bultos.

Diferencia entre hembra y macho de Pogona
Diferencia entre hembra y macho - Imagen de Jordi Ribó

Reproducción: Para su reproducción se recomienda someter los animales a una hibernación. Esta no es estrictamente necesaria pero sí es muy beneficiosa para su salud. Para la hibernación habrá que darles un tiempo de transición de 3-4 semanas. El primer paso es dejar de alimentar a los Pogonas ya que de lo contrario se podría descomponer el alimento en el tracto digestivo.
Pasadas unas 2 semanas del periodo de transición se reduce las horas de luz y calor así como su intensidad. Durante las próximas 6-8 semanas las luces y la calefacción permanecerán apagadas y la temperatura quedara en temperatura ambiente de la habitación, que debería ser sobre los 18ºC. Es importante no alimentar los animales durante la hibernación aunque sí deben disponer de agua fresca. Habrá que proporcionarles mucha tranquilidad y limitar la manipulación. Pasadas las 6-8 semanas se volverá paulatinamente a los parámetros normales en un periodo de dos semanas y se les empezara a suministrar alimento de nuevo. Es muy importante controlar los animales durante este proceso ya que si perdiesen mucho peso habría que interrumpir la hibernación y llevarlo al veterinario.
En ningún caso hay que someter a una hibernación a animales enfermos ya que probablemente no sobrevivirían.
Los individuos de más de un año de edad, sanos, bien alimentados y que no tengan un parentesco directo estarán listos para el apareamiento. Siempre habrá que poner el macho en el terrario de la hembra para evitar que esta se estrese. A continuación, el macho morderá a la hembra por la nuca y tratará de copular con ella. Una vez se haya producido la cópula, pasarán 6 semanas hasta la puesta. Es importante alimentar muy bien a la hembra y proporcionarle mucho calcio.
Poco tiempo antes de la puesta la hembra se mostrará muy activa y buscará un sitio donde desovar. Hará excavaciones de prueba en varios sitios de terrario. Hay que proporcionarle un sitio con un sustrato húmedo pero no encharcado y a una temperatura de 25-30 grados. Una vez la hembra encuentre el lugar adecuado desovará y pondrá entre 20 y 30 huevos.
Una vez realizada la puesta hay que proporcionarle mucho alimento a la hembra ya que quedan muy exhaustas. No conviene dejar los huevos en el terrario ya que no sobrevivirían. Habrá que sacarlos con mucho cuidado y vigilando no rotarlos sobre su eje longitudinal ya que de lo contrario el embrión moriría. Los huevos los colocaremos en una tarrina con partes iguales de agua y vermiculita. Esta tarrina deberá ir dentro de una incubadora a una temperatura comprendida entre los 26-29 ºC y una humedad relativa del 95%. Los animales tardarán en nacer entre 50 y 80 días.
No se pondrán más de 10 recién nacidos en un terrario de 100 x 50 x 50 cm con los mismos parámetros que los adultos. Si mantenemos demasiados lagartos en un mismo terrario es muy probable que algunos mueran por estrés mientras que otros morderán las colas y dedos de otros lagartos al tener hambre llegando a causar importantes mutilaciones.
Los neonatos pueden tardar unos días en comer. La comida será la misma que los adultos pero con el tamaño adecuado, y también se les debe suministrar vitaminas, minerales y calcio. Estos animales crecerán con mucha rapidez y con tan solo un año de edad es probable que lleguen a los 50 cm.

Pogona vitticeps durante la cópula
Pogona vitticeps durante la cópula - Imagen de Jordi Ribó

Puesta de huevos de Pogona vitticeps
Puesta de huevos - Imagen de Jordi Ribó

Crías de dragón barbudo naciendo
Crías de dragón barbudo naciendo - Imagen de Jordi Ribó

Crías de Pogona vitticeps
Crías de Pogona vitticeps - Imagen de Jordi Ribó

Problemática: Estos lagartos no suelen presentar problemas en su mantenimiento, aun así, a veces pueden surgir algunas complicaciones. La disecdisis es uno de los principales problemas de esta especie. Las dificultades para la muda pueden surgir cuando se mantienen los animales en terrarios demasiado secos. Hay que prestar atención en los dedos y la punta de la cola ya que pueden ocasionar necrosis. Para solucionar esto se bañaran los animales en agua a una temperatura de 25-30ºC durante 15 minutos y se aumentará la humedad del terrario.

Dragón barbudo
Dragón barbudo - Imagen de Jordi Ribó

Fases
En la actualidad existe una gran variedad de fases obtenidas mediante cruces selectivos. Las principales son:

- Citrus: Consiste en un coloración totalmente amarilla brillante parecida al color de un limón.

Pogona vitticeps citrus
Pogona vitticeps citrus - Imagen de Jordi Ribó

- Red: Se distingue básicamente por su coloración rojiza.

Pogona vitticeps red
Pogona vitticeps red - Imagen de Jordi Ribó

- Orange: Reciben la fase “orange” aquellos Pogonas que tienen una coloración naranja.

Pogona vitticeps orange
Pogona vitticeps orange - Imagen de Jordi Ribó

- Leatherback: Se caracteriza por la reducción de las escamas en forma de pinchos.

Pogona vitticeps leatherback
Pogona vitticeps leatherback - Imagen de Jordi Ribó

- Silkback: Se caracteriza por la ausencia de escamas en todo el cuerpo. Para obtener esta fase se deberá cruzar un macho y una hembra de fase leatherback y será necesaria la combinación de ambos genes.

- Hipomelanismo: Conocida como hypo, esta fase consiste en la notable reducción de la pigmentación negra en todo el cuerpo. Una forma de ver rápidamente esa fase es mirando las uñas del animal; si estas son totalmente trasparentes será un pogona hypo mientras que si presenta la típica raya negra no.

- Translucent: Es la presencia de una piel casi trasparente. También se conoce como “Trans”.

- Dunner: Se caracteriza por tener la base de las escamas redondas, por lo que crecen de forma de cono.

- Witblits: Se caracterizan por tener una ausencia de patrón.


Bibliografía:
-HAUSCHILD, Andree (2005) - Pogona vitticeps, Los dragones barbudos
-BRUINS, Eugène (2002) - La enciclopedia del terrario
-ZOFFER, D./ MAZORLING, T. (2008) - Dragones barbudos y lagartos de collar.

Texto e imágenes: Jordi Ribó

  
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