Testudo marginata weissingeri - Tortuga del Peloponeso

Testudo marginata weissingeri - Tortuga del Peloponeso
Testudo marginata weissingeri - Imagen de Ivixotics

Testudo marginata weissingeri (Bour, 1995)
Tortuga del Peloponeso
Inglés: Peloponnese tortoise
Alemán: Peloponnes-Landschildkröte

Taxonomía: El género Testudo está formado por 5 especies distintas. Testudo marginata weissingeri es una posible subespecie de Testudo marginata, aunque no todos los autores están de acuerdo.

Especies similares: Sólo puede confundirse con el resto de subespecies de Testudo marginata, sobretodo en los ejemplares juveniles.

Morfología: Tiene un caparazón bastante abombado, y de forma más bien alargada. Los ejemplares adultos tienen el caparazón de color muy oscuro (más que las Testudo marginata marginata), con alguna mancha amarilla en el centro de los escudos. El plastrón es también claro con dos grandes manchas negras que lo cubren casi todo.
El plastrón es claro, con unas manchas negras triangulares.
Una característica distintiva de esta especie es que tienen los escudos marginales en forma de faldón, aunque estos son menos pronunciados que en Testudo marginata marginata, y son más verticales.
Las patas y la cabeza también son de color marrón. En las patas se observan unas escamas bastante grandes y duras. Las uñas también son bastante fuertes y resistentes.

Testudo marginata weissingeri
Testudo marginata weissingeri - Imagen de Ivixotics

Tortuga del Peloponeso
Testudo marginata weissingeri - Imagen de Ivixotics
 
Dimorfismo sexual: Es bastante sencillo distinguir ambos sexos, siempre que la tortuga ha alcanzado ya un tamaño mínimo. El macho tiene la cola mucho más larga y ancha y tiene los escudos anales mucho más
abiertos. Los machos suelen ser más grandes, tienen el plastrón algo convexo y tienen los escudos supracaudales curvados hacia dentro.

Tamaño: Suelen llegar a medir entre 20 y 22 cm.

Distribución: Habita en una zona muy restringida al sur del Peloponeso (Grecia), en la vertiente occidental de las montañas Taygetos.

Hábitat: Su hábitat son las laderas de las colinas, donde se pueden encontrar gran cantidad de olivos y maquia.

Mantenimiento: Esta especie, si es alimentada debidamente, acostumbra a ser muy resistente. Se recomienda tener estos animales en recintos al aire libre todo el año en las zonas mediterráneas, pero en otros lugares de la península es posible que también soporten el invierno al exterior. El recinto debe ser espacioso, para permitir que den largos paseos. Es recomendable que haya pequeñas cuestas y obstáculos, como piedras y troncos. Debe haber varias cuevas donde los animales puedan esconderse en las horas más calurosas.
No es recomendable que haya un alto nivel de humedad, ya que podría provocar problemas pulmonares.
Es muy importante que la zona donde alberguemos estas tortugas sea bastante soleada.
El recinto también debe tener pequeños charcos permanentes poco profundos (5-10 cm) con agua siempre fresca y limpia, donde las tortugas se bañarán y beberán el agua que necesiten.
Se debe cercar la zona para evitar que las tortugas se puedan escapar. Hay que tener en cuenta que son unas grandes escaladoras.
Los ejemplares juveniles deberán estar en un recinto a parte, más pequeño y cubierto con una tela de rejilla, para evitar que sean depredados por gatos, aves,... Deberán tener también un ambiente seco, con un recipiente con 1 dedo de agua, para evitar que se puedan ahogar.

Testudo marginata weissingeri
Testudo marginata weissingeri - Imagen de Ivixotics

Testudo marginata weissingeri
Testudo marginata weissingeri - Imagen de Ivixotics
 
Alimentación: Es una especie estrictamente herbívora. Se deberá alimentar a base de plantas silvestres y vegetales. Los más recomendables son: césped, diente de león, achicoria, alfalfa, trébol, lechuga, escarola, col china, endibia, un poco de zanahoria,... No se debe abusar de las coles y espinacas, pues tienen demasiado ácido oxálico. Tampoco es recomendable darles demasiado a menudo vegetales jugosos, como tomate, pepino,...
El cactus sí que puede formar parte de su dieta, ya que contiene gran cantidad de fibra. También aceptará hojas de algunos árboles y malas hierbas.
Nunca se les debe suministrar fruta.
La mejor opción, sin duda, es plantar en su recinto gran variedad de plantas y vegetales, para que se autoabastezcan. Se les puede añadir de vez en cuando pienso para tortugas terrestres, pero no les suele gustar demasiado.
Nunca se les debe dar carne, pescado, pienso para gato, pienso para tortugas acuáticas,... ya que contienen demasiada proteína y podría ser muy perjudicial para ellas.
En libertad se alimenta básicamente de escila (Urginea maritima).

Comportamiento: Es una subespecie que si se alimenta adecuadamente y tiene espacio podrá convivir con nosotros muchos años.
Los ejemplares de menos de 2 años no es recomendable que hibernen.
En libertad solo llegan a hibernar durante los días más fríos del año, estando activas el resto del invierno.
En cautividad pueden hibernar, por lo que se deberán acondicionar las cuevas con un poco de paja. Algunos ejemplares es posible que se entierren en otras zonas para la hibernación. Hay que vigilarlas constantemente, para evitar que sean dañadas por ratas o gatos.
Se adaptan muy bien a la cautividad, y con poco tiempo ya se sabrán los horarios de comida y estarán pendientes a que lleguemos.
En verano suelen estar activas por la mañana y por la tarde, y en el mediodía se refugiarán del calor en sus cuevas. En primavera y otoño estarán activas desde media mañana hasta que comienza la tarde.
En su hábitat suelen estivar durante los meses de julio y agosto, cuando el clima es más caluroso y seco. Para protegerse del calor excava pequeños túneles, se esconde entre las piedras o utiliza las largas madrigueras hechas por otros animales.

Reproducción: La madurez sexual suelen alcanzarla a partir de los 11 años en los machos, y a partir de los 14 en las hembras.
Para cortejar a la hembra, el macho le propina fuertes mordiscos en las patas y la enviste dándole fuertes golpes con su caparazón. Luego, si la hembra se deja, la monta y emite unos pequeños chillidos.
La hembra pondrá los huevos entre junio y julio, en alguna zona seca y soleada. Pone unos 4 huevos en cada puesta.
Las crías nacerán entre agosto y septiembre, normalmente después de algunas lluvias.
Se recomienda la incubación natural.
Si se quieren incubar de forma artificial, se deberán tener a 30 ºC, y la incubación durará unos 60 días.

Problemática: Al tener una área de distribución tan limitada, esta especie puede ser muy vulnerable. La urbanización de muchas zonas de su distribución, el turismo y la extensión de cultivos son serias amenazas para esta especie.

Legislación: Está incluida en el Apéndice II de la CITES.

Bibliografía consultada:
- AVANZI, M. / MILLEFANTI, M. - El gran libro de las tortugas. Editorial De Vecchi, Barcelona.
- BONIN, F. / DEVAUX, B. / DUPRÉ, A. (2006) - Tortugas del mundo. Lynx edicions, Barcelona.
- VETTER, Holger (2002) - Turtles of the world Vol.1. Africa, Europe and Western Asia. Edition Chimaira, Frankfurt.

Artículo escrito por: Enric Pàmies

 
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